Un día Juanita y yo manejábamos al centro comercial para ir de compras. Yo manejaba en mi Ferrari rojo muy rápido en la carretera! Nosotras no queríamos perderse las ventas. De repente, Juanita gritó, “Tú estás manejando demasiado rápido!” Yo dije , “No Juanita! Esta es la carretera! Todo el mundo maneja rápido!” Juanita me dijo, “Yo veo la policía! Ay caramba!” Yo dije,  “No te creo!” Entonces, Yo oí las sirenas y Juanita las oyó, también. Me di cuenta que yo no obedecí la ley o Juanita. El policía nos paró y nos atrapó. Nosotros esperamos por el policía para venir fuera de su carro. Cuando vino a nuestro carro, nos dijo, “Buenas tardes señoritas.” Yo le dijo, “H-o-la, Señor...” Ay! Yo no tuve ver alguien tan guapo! Pero, claro lo tuvo el policía. Yo no pensé, yo podría hablarle a él. Yo me sentí vergüenza enfrente del policía. El policía nos dijo, “Yo prefiero te quedes aquí por un momento.” Yo aseguré que me porté bueno. “Claro quesí, Señor!” El policía caminó a su carro. Juanita me dijo, “Yo te dije, ja!” Yo le dije, “Tú estabas de mal humor, Juanita. Mal tiempo por chistes. Quiero que salgas!” Juanita me dijo, “Yo no puedo!  Nosotras estamos por una carretera! Tú estás loca!” El policía venía a nuestro carro y nos dio una multa por exceso de velocidad. Yo le dije, “Ay señor, por favor no nos no nos dé la multa! Nosotros estamos inocente!” Yo pensó tener carisma! El policía muy guapo nos dijo, “Bueno, Yo daría una advertencia este un tiempo señoritas! Ten bien día!” El policía me dio el guiño y sentí el corazón conexión.